
En la árida planicie a las afueras de Sevilla, España, hay una torre de concreto de 116 metros de altura rodeada por 600 espejos enormes. En conjunto, forman una nueva planta generadora de energía solar que será capaz de producir suficiente electricidad para cubrir las necesidades de una población de 6,000 habitantes.
La planta emplea una tecnología llamada Concentración de la Energía Solar y representa algo así como el Santo Grial del sector de la energía: el intento de producir a gran escala energía solar viable, desde el punto de vista comercial.
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