
Más tarde, el Islam agregó medidas para "la preservación de la modestia para la mujer" -como bajar sus ojos en público, ocultar sus pechos y la joyería, y cosas similares. Sin embargo, estas restricciones fueron extendidas posteriormente por los seguidores del profeta mucho más lejos de sus intensiones originales, como están expresadas en el Korán, y permanecieron más o menos como una fijación permanente de la vida musulmana desde ese entonces.
Sin embargo y posteriormente, la inseguridad del Islam primitivo se agregó a la exclusión de la mujer, y 100 años después, durante el reinado de Abbasid Calif Harun ur Rashid, las mujeres se convirtieron exclusivamente en juguetes sexuales y máquinas de reproducción; y como mujeres casadas eran sólo sirvientas -simplemente apéndices sociales de los hombres. Más aún, como esclavas sexuales, las mujeres se podían comprar y vender libremente en mercados abiertos de todos los países islámicos, y se podían hipotecar, rentar, o prestar como regalos a los amigos. El mismísimo profeta prestó esclavas sexuales a sus favoritos. No había límite al número de esclavas que uno podía poseer; uno de los compañeros del profeta Hazrat Zubair Ibn ul Arvan, por ejemplo, tenía 1000 esclavos y 1000 esclavas sexuales. El Islam tomó a la mujer como la tierra para que el hombre depositaría sus semillas.
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Es incrible que en pleno siglo XXI se sigan dando estos tratos atroces hacia las mujeres, se entiende que son una cultura diferente, pero llegan al limite de lo inhumano.
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