
Durante los 18 años en que creció en Miami, Ryan Dandes nunca utilizó el Metro.
En los últimos dos años de preparatoria en Miami Palmetto Senior, utilizaba su auto para moverse.
Pero ahora Dandes, junto con otros alumnos que comienzan ahora sus clases en la Universidad de Miami (UM), tendrá que pasar por un agudo síndrome de privación.
Por primera vez, la Universidad va a prohibir los automóviles de todos los alumnos que comienzan primer año y van a residir en el recinto universitario, convirtiéndose así en el primer colegio del estado que obligará a sus alumnos a utilizar transporte público o bicicletas.
'Fue un poco triste el otro día cuando le tuve que dar las llaves del auto a mi hermano menor', dice Dandes. Pero creo que estará bien. No creo que vaya a necesitar ir a ninguna parte donde no haya algún autobús o tren que pueda utilizar'.
Los estudiantes también tienen una tercera alternativa. Pueden alquilar un auto en el recinto universitario por cortos períodos de tiempo.
Por sólo $8 la hora, un estudiante puede alquilarle a ZipCar, una compañía que les da a los estudiantes acceso a corto plazo a automóviles de kilometraje eficiente. La UM está importando dos ZipCars para alquilarlos a los estudiantes.
'En realidad, estoy entusiasmada de no tener mi auto', dice la alumna de primer año Meghan Lane, de 18 años. Me gusta mi bicicleta. Si necesito un auto, alquilaré un ZipCar.
La acción de la UM de prohibir los automóviles es parte de su iniciativa llamada 'Green U', iniciada hace unos cuatro años para reducir la dependencia de la universidad en combustible fósil y hacer el recinto más sustentable.
Alan Fish, vicepresidente de servicios empresariales de la UM, dice que el concepto es lograr que los estudiantes cambien de hábitos al inicio de sus carreras académicas. En la UM alrededor de 85 por ciento de los nuevos alumnos viven en el recinto universitario, de modo que la prohibición de los autos significa que habrá 500 autos menos estacionados, y en las autopistas del sur de la Florida, según dice la portavoz universitaria Marie Guma.
El programa es bueno para el planeta, pero significa que la UM tendrá que renunciar a los ingresos que recibe por concepto de permisos de estacionamiento. Fish dice que los espacios de más se pueden convertir en más espacios de vivienda para los alumnos que vienen y van.
'Se trata de cambiar los hábitos de los estudiantes y del cuerpo docente, y por último cambiar al planeta y salvarlo', dice Fish.
Esta semana la universidad inició el programa 'U-bike', de venderles bicicletas a los alumnos por $59. Fue un gran éxito.
El primer grupo de bicicletas se vendió el miércoles, y hubo que encargar otras 100, que vienen en los colores requeridos, naranja o verde.
Frente a la librería estudiantil de UM el jueves, había una fila de estudiantes bajo unos robles. Había un pequeño grupo de bicicletas que disminuía gradualmente según los alumnos escogían las que querían, ansiosos de iniciar su nuevo estilo de vida ecologista.
OSCAR CORRAL
The Miami Herald
No pude evitar
ResponderBorrarsonreir
mientras leia
saludos
jelipe