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La vía express de Seul: Cheonggyecheon

La historia del Cheonggyecheon es la historia del desarrollo industrial experimentada por una de las ciudades más grandes del mundo: Seúl. El río que atravesaba la ciudad de norte a sur se convirtió en un drenaje mientras Seúl se transformaba en una gran urbe hasta que finalmente se embovedó y sobre su cauce se edificó una gran avenida que llegó a tener en sus doce carriles, un tráfico de 160,000 vehículos diarios hasta alcanzar altísimos niveles de contaminación sonora y ambiental en la zona, lo que perjudicaba la calidad de vida de sus habitantes.



En 1999, el alcalde Lee Myung Bak decidió cortar por lo sano y en una radical apuesta por el desarrollo sostenible decidió liderar el proyecto que sustituiría la autovía por el río. No faltaron las críticas, los malos augurios y las advertencias sobre el caos vial, pero el empeño político no decayó. Las encuestas realizadas mostraron que los ciudadanos creían que el mayor valor de Seúl debía ser su medio ambiente. Paralelamente se potenció el transporte público y el tráfico de vehículos se redujo notablemente.



El proyecto responde a una planificación estratégica donde los principales gestores fueron en primer lugar el alcalde, y en segundo lugar, no menos importante, la ciudadanía, organizada en un comité ciudadano dirigida por el urbanista a cargo del proyecto, Kee Yeon Hwang. El rol del urbanista más que solo diseñar el proyecto, fue además de partícipe en la integración con los ciudadanos, haciéndolos formar parte de la gestación y diseño del mismo. Una de las problemáticas más importantes y que desencadenó una serie de decisiones fue solucionar la congestión vial que sufrían los usuarios de la avenida. Esto llevó a la ampliación de calles, pero además a un incentivo del transporte público, por lo que este también se modificó, dejando claro que el principal tráfico iba a ser peatonal, mejorando su señalización, nuevos cruces y facilidades para el transeúnte. Quizás lo fundamental, fue la importancia que se le dio a la participación ciudadana. El gobierno realizó audiciones públicas y sesiones representativas para recoger opiniones y se realizaron más de 4000 entrevistas con comerciantes antes de comenzar las demoliciones. A partir de éstas, se tomaron otra serie de medidas, como por ejemplo, minimizar ruido y polvo de los trabajos, traslado del comercio ambulante y estacionamientos a puntos específicos que se adecuaron para recibirlos.

En 2006 y tras haberse gastado 380 millones de dólares en unas obras que duraron tres años, se inauguró el nuevo parque con una longitud de 8 kilómetros de rivera y con una extensión total de 400 hectáreas. Se han plantado árboles, se han instalado depuradoras, en consecuencia, se ha regenerado una zona anteriormente deprimida, tanto a nivel ambiental, porque ahora el río actúa como un climatizador ambiental refrescando las zonas aledañas, el viento corre y se ha reducido muy notablemente el nivel de contaminación; como a nivel social, ya que los barrios que atraviesa el Cheonggyecheon se han revalorizado económicamente.



Ahora, bajo sus puentes, en verano se proyectan películas, el agua baja limpia, es un espacio tranquilo y sosegado en medio de una gran ciudad, hay tiendas de ropa, mercadillos y restaurantes en su rivera que están abiertos incluso de noche, es, en resumen, el centro de ocio preferido por los habitantes de Seúl. Donde antes circulaban 160,000 vehículos diarios ahora familias, parejas y turistas pasean por las dos orillas del río. Veintidós puentes lo cruzan para mantener unidas las dos partes de la ciudad que antes se miraban la una a la otra a través de la autopista. El riachuelo ahora fluye a través del corazón de Seúl y se transformó el lugar no sólo en un moderno espacio público de recreación sino también en un tesoro para el ecosistema.

Los ciudadanos de Seúl llenaron de elogios al alcalde Lee. En mayo de 2006 Asian Times informaba:"Seúl, alguna vez un símbolo de la selva de cemento, ha logrado una exitosa transformación de su faz en un oasis verde y ahora esta inculcando sobre todas las ciudades asiáticas el amor por el medio ambiente", ilustrando la nota se publicaba una fotografía de Lee en medio de las aguas del canal de Cheonggyecheon, con los edificios de Seúl a sus espaldas. Aún más, en octubre de 2007 fue elegido "Héroe del Medio Ambiente" por la revista Times junto con el ex vicepresidente norteamericano Al Gore.

Lee Myung Bak ganó las elecciones presidenciales de Corea del Sur en Diciembre de 2007 con el 48.7% de los votos.

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