En el centro histórico de Guadalajara se pueden medir todos los días índices de ruido superiores a los 55 decibeles que marca como máximo recomendable en espacios abiertos la Organización Mundial de la Salud. Por la avenida 16 de Septiembre, a la altura de los templos de Aranzazú y San Francisco, pueden pasar cerca de 300 autobuses por hora, producto de un histórico desgarriate en el trazo de las rutas de transporte público. Ocho de cada diez rutas de transporte colectivo en la ciudad pasan por el centro histórico a pesar de que nuestro país ha firmado tratados internacionales en los que se compromete a retirar rutas que pasen por calles secundarias en centros históricos patrimoniales. Después de las 10:00 p.m. el centro queda abandonado en amplias zonas incrementando inseguridad y vandalismo. Aunque Vialidad proyecta algunas rutas nocturnas de transporte colectivo lo hace sin consulta previa a los vecinos ni estrategia alguna de socialización. Al menos a los vecinos del Santuario no p...