Mucho se ha escrito sobre los beneficios individuales y colectivos que provoca el uso de la bicicleta en temas de salud, ambientales, económicos y múltiples etcéteras. Gran cantidad de problemas urbanos y de agendas gubernamentales se resuelven o disminuyen significativamente incrementando el uso de la bici, entonces pues, promovamos su uso. Esto parece fácil. Cualquiera pensaría que fomentar el uso de la bicicleta es solamente un asunto de salir a las calles con pancartas que digan “usa tu bicicleta”, pero de fondo es un asunto mucho más complicado. Por décadas, la bicicleta fue relegada a segundo término y se impuso sobre ella un estigma social de clase: La bici es de pobres. Hoy, buscar que más gente la use implica renovar y revalorar al usuario de la bicicleta a través de campañas de comunicación que hagan énfasis en los valores que posee el que va a bordo de una bici. Es decir tenemos que transformar la cuestión aspiracional. El ciudadano normal debe pr...